martes, 6 de julio de 2010

Entre las Butacas y los Bleachers

Pablo Grajales Rojas
pgr.tigres@gmail.com

Orden del caos
La Liga Mexicana de Béisbol solicita la asistencia de Darren Aronofsky -o Agustín Carstens en su defecto- para resolver el complejo crucigrama matemático que engloba el cierre de la temporada Bicentenario 2010. El primero escribió y dirigió el largometraje Pi en el cual el personaje Maximilian Cohen se desvela por encontrar el número que abra el candado del patrón universal en la naturaleza. El segundo debe saber cómo calcular los impuestos en México gracias a la publicación de su ‘práctico’ manual de más de mil páginas. En un país con promedio literario por los suelos. Genial.
Al caso, el sistema competitivo del circuito de pelota azteca comprende la suma de puntos por cada vuelta para que los tres clubes que más unidades acumulen accedan directamente a playoffs mientras el cuarto invitado lo hace por porcentaje de ganados y perdidos. Vaya sorpresa nos encontramos la semana pasada cuando, en plena transmisión, calculamos que un triunfo de Leones sobre Tigres eliminaba a Yucatán y regalaba su boleto a Piratas de Campeche. La infinidad de posibilidades matemáticas infiere directamente en el béisbol por lo que, de aquí al cierre del telón, habremos de revisar minuciosamente el standing día con día, juego con juego.
En 2009, Orlando Sánchez, manager del a la postre campeón Saraperos de Saltillo, no tenía ni la menor idea de qué debía hacer para calificar por lo que jugó a la ruleta rusa y utilizó un pitcher por entrada. Rafael Díaz, Noé Romo, Cecilio Garibaldi, Alejandro Garrido, Mario Mendoza, Julio Jiménez, Rafael Martín, Travix Minix y Miguel Saladín se combinaron para dar el triunfo a los coahuilenses sobre Reynosa. De haber perdido, y que Laguna triunfase sobre Monclova, pudo darse un triple empate en puntos y resultante definición por standing, donde Saltillo estaba bien ubicado. Nerio Rodríguez y Tim Lavigne permitieron a Acereros levantar los brazos 3-2 de manera por demás dramática y, sin embargo, la novena del acero quedó marginada. Un último día de auténtica locura.
La probabilidad numérica permitirá que, llegando al 18 de julio, otra vez Leones tenga en puerta la opción de ganar y eliminarse o dejarse perder para avanzar. Una paradoja que pone en entredicho la esencia del béisbol: siempre jugar para ganar.
De una u otra forma, las dos semanas que nos quedan en el rol regular serán electrizantes y cuatro equipos sureños: Oaxaca, Tigres, Yucatán y Campeche pelearán a muerte los tres pases que quedarán libres una vez que Puebla amarre su ingreso a la fiesta de la postemporada. Esperemos que no se cumpla la cita de Sol Robertson: “No habrá orden, sólo caos”.

Correrías carreteras
En 2010, de los cinco equipos involucrados por la zona Miguel Hidalgo para ir a playoffs, solamente Puebla (24 ganados y 20 perdidos) y Oaxaca (24-21) ostentan marca triunfadora fuera de casa. Tigres (22-27) y Leones (19-29) tienen garantizado cerrar con años perdedores en gira, mientras Campeche (22-23) está en la tablita.
He aquí el registro de los más recientes seis concursos en gira:

Revisando los números en la carretera para los cuatro clubes más constantes de los últimos años (aunque Puebla estuvo en Zona Norte), ésta es la primera ocasión que los bengalíes no tendrán un registro victorioso al menos en los últimos seis calendarios. Leones tendrá su tercera temporada sub .500. En realidad, los Tigres son el equipo más constante pero indudablemente 2010 ha sido un año complejo no solamente para ellos sino para la mayoría de los clubes del circuito. He ahí la razón por la cual buscar el segundo lugar global es imperante. Será la misiva felina para los 12 desafíos pendientes.

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